Evgueni Stuchenko: A la izquierda muchachos, a la izquierda, pero nunca más a la izquierda de vuest

jueves, 10 de junio de 2010

EL CUARENTA DE MAYO








Llovió como si luz
y dicen que nevó en los altos montes,
allá en las cordilleras
lejanas de Talbania.

Mi espíritu intranquilo
que siempre está esperando que la lluvia
sea cada mañana y cada tarde
bálsamo y miel contra su ira seca,

mi espíritu y mi cuerpo
gozan del cielo así y el agua mansa
como quien fue ofrendado
por un vaso de amor ante el desierto.

¿Recuerdas aquel junio, aquel oasis
frente a los farallones
del verano al acecho
y un día por vivir únicamente?

Yo te cambié de nombre.
Tú venías del norte y su misterio.
Te nombré ─ya recuerdas─
Lluvia para que vuelvas cada junio.

4 comentarios:

Talbanés dijo...

Que bonito poema amigo Pruden. A todos nos sorprendió esta refrescante lluvia de junio tras estos días de intensa calor... se agradece. A mi me pilló allá en Aznalcázar, en un mar de pinos muy cerquita de Doñana... el olor a tierra mojada se mezcló con el de los pinos resultando un aroma embriagador. Así es junio en el Sur, en una misma semana casi se alcanzan los 40 grados y a la siguiente lluvia y 25 grados en el termómetro. Me encanta este mes, además también es el de las luciérnagas (junto con las primeras semanas de julio), el año pasado se me fue sin ir a verlas, pero este intentaré hacerles alguna visita y espero volver a verlas brillar en la noche de Talbania, invitado quedas si te apetece.
Un saludo.

Talbanés dijo...

No se por qué pero salió dos veces el comentario... la informática y sus misterios jeje

Prudencio Salces dijo...

Te tomo la palabra para ir a ver las luciérnagas. Hace tantos años ya que no las contemplo. De niño, ya comprendes. No he de repetir lo que habrás oído de otros de mi edad: cuando dormíamos en las eras... cuando íbamos con el hermano mayor, o con el padre, a barcinar... Las luciérnagas, las estrellas, la infancia y el culo del mundo. Así que avísame cuando sea el momento.

Gracias por tus palabras que sé sentidas

La Cocinera Políglota dijo...

Pruden, preciosa entrada y preciosa la segunda fotografía que la acompaña. Al verla, me parece oír el sonido del agua.

Casualmente, mi último post trata también sobre la lluvia de estos días de Junio.

Saludos