Son los amos del mundo.
Temen perder su gracia aunque se mueran
de hambre,
humillación
o balas
sus hermanos en Cristo.
Son dueños de los bancos,
del mar y los gobiernos.
Dominan la perfidia como el crimen
y el arte
de mentir
para vencer.
Usan de la sonrisa,
la entrepierna,
la imagen de perfil y los sabuesos
que recogen
esputos
y putas desechadas.
Yo lo siento por ellas, pero ellas
les preparan la misa,
la mierda
y la muralla
donde viven seguros,
al margen
de peligros,
canciones,
insultos como nuevas avenidas
que cubren nuevamente de lapas destructoras.
Todo está prevenido,
no hay nada que extrañar de su codicia,
nada provisional en el desguase
donde pobres y humildes cagan miedo.
Son los amos del mundo,
son los amos de Dios,
son los amos del mar y de los hombres,
y saben defenderse
con iglesias,
patrañas,
religiones,
ejércitos de espanto,
con leyes como heridas,
con razones
de guerra transmisible,
desde que con un trozo de metal con palo
se inventara el pronombre posesivo,
el feudo,
la frontera,
la herencia, el usufructo.
Esto será un panfleto con las manos impuras,
una endecha colérica de espíritu,
una silva
de ramas desgajadas,
con los troncos heridos,
podridos,
malolientes:
es toda la fortuna
que los amos del mundo,
que los amos de Dios y la alegría
van dejando a su paso
por la calle y alma de mi boca...
desarmada
desarmada
4 comentarios:
Desarmada y desalmada (sin alma) tienen algo en común. Algo más que lo que ortográficamente se aprecia. Pero ni estás des-almado,ni tampoco desarmado, porque yo sigo creyendo en los poetas, en los auténticos. Y no me valen imposturas: la novela tiene sus cauces, la poesía sus mares. Y no se puede luchar contra ellas. Por lo demás, el silencio no es poético nada más que para los poetas impostores. Bienvenidos sean tus gritos, Pruden.
Luis, a propósito de tu observación sobre el desarme de nuestra socidad y las almas desalmadas de los amos del mundo, quiero puntualizar que mi verso dice, en efecto, "desarmarda", para evitar confusiones ortográficas de las muchas que, en realidad, abunda mi gramática.
Gracias por tu comentario y su contenido, pero un servidor, hace tiempo que desconfío de la dichosa poesía precisamente por lo que de impostura hay en la belleza... Pienso que el último gran poeta que nos ha dado nuestra lengua fue Mario Benedetti, el hombre. Y no es por moverte a ti el gusto, que sé cuándo lo admiras, sino que tal vez con citarlo se entienda algo de lo que digo.
Salud
"Son los amos del mundo,
son los amos de Dios,
son los amos del mar y de los hombres,
y saben defenderse
con iglesias,
patrañas,
religiones,
ejércitos de espanto,
con leyes como heridas,
con razones
de guerra transmisible,
desde que con un trozo de metal con palo
se inventara el pronombre posesivo,
el feudo,
la frontera,
la herencia, el usufructo."
Magníficos versos.
Puntual descripción de "los amos del mundo , de Dios y la alegría".
Quisiéramos verlos rendir cuentas por la ruindad de sus actos generados en la soberbia y la deshumanización.
Adhiero a tu magistral clamor poético!
Un abrazo.
"No me gaste las palabras,
no cambie el significado,
mire que lo que yo quiero
lo tengo bastante claro.
Si escribe reforma agraria
pero sólo en el papel...
mire que si el pueblo avanza...
la tierra viene con él..."
-Benedetti (Las palabras)-
"Dominan la perfidia como el crimen
y el arte
de mentir
para vencer."
Se sienten amos de "las palabras"y las emplean para mentir y ... vencer.Tal cual.
Inadmisible pero real.
Abrazo.
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