Evgueni Stuchenko: A la izquierda muchachos, a la izquierda, pero nunca más a la izquierda de vuest

martes, 11 de marzo de 2008

11 de marzo, madrid




(Abu Ghraib. Guantánamo)

En las islas Azores se conjuró el oprobio, el odio y la soberbia, invocaron el arte de la guerra y su mentira / e inventaron un nuevo testamento: Bush, Blair, Aznar: tres nombres como tiros de escopeta. Tres viejos pistoleros que por cuenta propia se adueñaron la vida de los otros. La razón era suya; los pueblos eran suyos; el poder, su nostalgia concebida.
Fue allí la desventura del orgullo.
Talbania se quedó perpleja; España, atribulada. En Europa crecieron las banderas pero también las dudas, en tanto Palestina desangraba ─en nombre de la Biblia─ su perfume. La flor de cada edad. Pero Estados Unidos alzó su religión de metralla y venganza, y aquí Mesopotamia despojada de rosas, de leyendas y vidas verdaderas.
El horror, el horror, vaciándose a menudo en los mercados.
Aún no he dicho la palabra pánico (eso estalló en Atocha), pero sigue lloviendo en los desiertos la sangre de Dios mismo si existiera.

8 comentarios:

Antonio Ruz dijo...

Violencia enjendra violencia.

Aunque no comparta la respuesta, no se puede esperar que quien pase toda una vida con el cuello bajo la bota del poderoso, cuando se le presente la ocasión no invoque venganza.

Luis Quiñones Cervantes dijo...

Suscribo contigo la tristeza de los aniversarios tristes. Aquí también nos hemos acordado de Talbania, de las Azores y de los que nos azoraron el alma con su injusticia, rumiada pies en lo alto de las mesas donde se firman las desgracias. Gracias por recordárnoslo tú también y por denunciarlo tan poéticamente como tales actos apenas se merecen.

miguelangel dijo...

Es curioso. ¿Sabéis que desde el punto de vista evolutivo, desde el criterio de la selección natural, la detestada “foto de las Azores” era lo que más le convenía a España? Todo los estudiosos de la evolución afirman que el desarrollo de todas las especies apuntan en este sentido y no en la dirección contraria...

Salud

Prudencio Salces dijo...

Pero seguirá siendo una criminal injusticia, ¿o no?

miguelangel dijo...

Casi todos detestamos la "foto de las Azores". Algunos nos manifestamos contra lo que suponía, fuera en Sevilla, fuera hace muchos años en Barcelona con la anterior guerra del golfo.. Pero no me gusta justificar aquel atentado, aquel acto cobarde, como quieren que hagamos, como si de un síndrome de estocolmo se tratase.. Mataron porque quisieron. Buscaron una justificación a lo injustificable. Y por mi parte no les daré ese placer. Que se pudran..

Luis Quiñones Cervantes dijo...

Perdón, pero no quisiera crear polémicas en este precioso blog. La poesía de sus autores es claramente antidialéctica. Pero discrepo de i75mara. No es justificar, sino explicar desde sus orígenes. Nadie ha justificado el atentado; se ha intentado razonar relacionándolo con la foto de las Azores, lo cual es, en resumen, cierto por cuanto caldeó una ambiente de rechazo hacia Occidente, en el que España desempeñó una función colaboradora con quien optó por invadir un país al margen de las leyes de los organismos oficiales y la moral.

¿Se justifica el terrorismo cuando se dice que los palestinos se defienden de lo que es en toda regla una invasión al margen del cumplimiento de todas las resoluciones de Naciones Unidas? No, pero es la explicación de un fenómeno real y terrible.

Nadie, con un mínimo de sentido, justifica la violencia. Pero la violencia, como fenómeno social, es explicable. El 11M, tristemente, nos afectó: más porque la cercanía magnifica los acontecimientos. Pero a diario hay oncesemes que pueblan con su negrura los periódicos, y en ellos hay porqués, que no significan aplausos, sino civilizados intentos de evitar que hechos así se repitan, en Madrid o en el Líbano.

miguelangel dijo...

Saludos Luis. Pruden sabe que soy partidario de que nuestros blogs, nuestros espacios de expresión, también sean lugares de debate, como bien dice él mismo a falta de una buena taberna. Y lo que quiero decir en definitiva es que cualquier psicópata es ante todo un gran manipulador, capaz de engañar al más experto en la materia. Y luego está su ausencia de empatía, su incapacidad de ponerse en el lugar de los demás y sentir remordimientos. Y esto para mí es un terrorista: un psicópata. Y me refiero a estos terroristas con altos niveles educativos que no se mueve por intereses materiales, sino religiosos, con los que no podemos negociar contraprestaciones de orden económico o territorial, sino de orden emocional y simbólico, con lo que ello supone de complejidad.

No puedo aceptar una relación causa-efecto entre las foto de las azores y los atentados de Madrid, ya que esto supone buscar otros culpables más allá de sus autores. No creo que los atentados de al qaeda en Argelia, por ejemplo, tengan que ver con ninguna foto ni ninguna intervención en Iraq. Nuestro mayor error es considerar a este tipo de terrorismo causado por motivos económicos o sociales. El yihadismo, en su guerra total contra cruzados, judíos e infieles, ataca a todos los niveles, incluso al deportivo, como bien hemos podido comprobar con la reciente amenaza en el Rally Lisboa-Dakar. No podemos olvidarnos de quiénes tenemos enfrente y cuáles son sus motivos.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.