Evgueni Stuchenko: A la izquierda muchachos, a la izquierda, pero nunca más a la izquierda de vuest

sábado, 9 de octubre de 2010


No llores porque ya se terminó. Sonríe porque sucedió.
Gabriel García Márquez.


Con estas sabias y enternecidas palabras se consolaba nuestra amiga Toñi Flamil al comunicarnos la defunción de su padre, el científico  MANUEL FLAMIL CAÑETE. Aunque nacido en Montalbán, el mundo de la cultura y de la ciencia le tiene asignado el gentilicio de cordobés.

Manolo realizó multitud de dibujos de manchas solares con su telescopio refractor de 50 mm
Foto: Irene Sánchez Flamil

En el obituario que el diario Córdoba le dedicó el pasado domingo, el astrofísico cordobés don Ángel R. López-Sánchez resalta de la valiosa naturaleza de nuestro paisano residente en Córdoba desde hace años: Toda una generación de científicos acudíamos a él para profundizar en esta ciencia. (http://angelrls.blogalia.com/historias/67886#606067)

Este reconocimiento sentido de su colega en la ciencia de la astronomía, resalta el mérito de Manuel Flamil, así como de su apreciada personalidad.

Manolo ha dedicado su vida al estudio de las manchas del sol y a divulgar esta parte de la cultura entre sus coetáneos. Desde el entusiasmo autodidacta de su juventud, cuando comenzara su afición aun viviendo en Montalbán, hasta ser, en 1982, fundador de la Agrupación Astronómica Cordobesa, en la que se le destacó como Miembro de Honorífico, su quehacer solitario ha sido siempre fructuoso.

Sus estudios sobre las manchas solares le han merecido reconocimiento internacional, y sus trabajos se han publicado en revistas especializadas tanto de España como del extranjero. Asimismo, es miembro de diversas sociedades astronómicas, como la de Sabadell, una de las más prestigiosas de Europa. (http://www.blogger.com/post-edit.g?blogID=1904764369837468949&postID=4038096119545263313)


Desde el ámbito de este blog, solicito del Ayuntamiento y del pueblo donde nació el 20 de abril de 1925, el merecido homenaje de rotular una calle con su nombre, para que siempre sea recordado por su aportación a la ciencia y la cultura. Falleció el pasado día 26 de septiembre. Fue un hombre pacífico, un hombre bueno.

 
Adiós, Manolo Flamil,
hombre estelar y terrestre,
te vas con tu sueño ecuestre
de caballero gentil
al alma del sol rupestre.

1 comentario:

Toñi Flamil dijo...

Muchas gracias Prudencio. Es una magnífica entrada que me emociona de forma especial por ir dedicada a mi buen padre.