Evgueni Stuchenko: A la izquierda muchachos, a la izquierda, pero nunca más a la izquierda de vuest

lunes, 28 de febrero de 2011

UNO DE MIS MAYORES

César Vallejo
(Perú, 1892-Paris, 1938)
Los Heraldos Negros
(1918)
LOS HERALDOS NEGROS
Hay golpes en la vida, tan fuertes... Yo no sé.
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma... Yo no sé.

Son pocos; pero son... Abren zanjas oscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán tal vez los potros de bárbaros atilas;
o los heraldos negros que nos manda la Muerte.

Son las caídas hondas de los Cristos del alma,
de alguna fe adorable que el Destino blasfema.
Esos golpes sangrientos son las crepitaciones
de algún pan que en la puerta del horno se nos quema.

Y el hombre... Pobre... pobre! Vuelve los ojos, como
cuando por sobre el hombro nos llama una palmada;
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como un charco de culpa, en la mirada.

Hay golpes en la vida, tan fuertes ... Yo no sé!



Mi homenaje

Escolástica y sinestesia del soneto
 
19

Suelta la lengua y con la lengua absuelta
César Vallejo el triste,
el burro peruano feo y triste,
(perdonen la franqueza), tronco de la verdad,

era como esos árboles de aspereza perenne
que el invierno avasalla y siguen altos.
Antes de morir, el pobre,
nos dejó del dolor memoria y ciencia.

César Vallejo vive, lo repito.
Yo lo he visto en París con su paraguas
abierto al devenir de las estrellas.

César Vallejo ha muerto sin voluntad de hacerlo,
ha muerto de vivir tan solamente
conmigo a su costado.

3 comentarios:

Carmela dijo...

Magnífico homenaje a César Vallejo.
Eduardo Galeano lo llama :" el poeta de los vencidos" con sumo respeto.
Tal vez... esa "caída de los Cristos del alma..." es la que reafirma nuestras convicciones.
Emotivo y bello tu poema .
"Era como esos árboles de aspereza perenne
que el invierno avasalla y siguen altos."
Es verdad.Las adversidades no menguaron su fortaleza ni su estatura.Tampoco su integridad.
Qué grato sentir que sigue vivo.
Vigente . Querible. Y admirado.
"Y si después de tantas palabras,
no sobrevive la palabra!" - C. Vallejo -
Sobrevive!!
Un abrazo.

Prudencio Salces dijo...

Claro, Carmela, que Cesar Vallejo, vive. La vigencia de estos seres es lo que hace entendible que en la humanidad aún quede un margen de bondad para resistir ante la soberbia general de este mundo en ruinas tendente a despachar la vida del planeta. Si no fuera por lo visionario y fraterno de la poesía todos seríamos saqueadores en los desiertos de la ambición.

Gracias y un afectuoso saludo con Argentina en el pensamiento. Otro día hablaremos de Julio Cortázar, el magnífico

Javier Colmenero dijo...

Suelta la lengua y con la lengua absuelta....
yo que suelo decir:"cuando sea mayor, aprenderé a callarme" rectifico, "cuando sea mayor aprenderé a decir, a decirme"

Muy hermoso tu homenaje
Gracias