Evgueni Stuchenko: A la izquierda muchachos, a la izquierda, pero nunca más a la izquierda de vuest

martes, 25 de octubre de 2011

Cuerpo de Pajilleras del Hospicio de San Juan de Dios, de Málaga

 

Por amor y devoción a una causa: la salud del soldado herido


En diciembre de 1840, se autorizaba la creación (merced a una especialísima dispensa del Obispo de Andalucía) del Cuerpo de Pajilleras del Hospicio de San Juan de Dios, deMálaga.

Las pajilleras de caridad (como se las empezó a denominar en toda la península) eran mujeres que, sin importar su aspecto físico o edad, prestaban consuelo con maniobras de masturbación a los numerosos soldados heridos en las batallas de la reciente guerra carlista española.

La autora de tan peculiar idea, había sido la Hermana Sor Esther Sifuentes, una religiosa de cuarenta y cinco años que cumplía funciones de enfermera en el ya mencionado Hospicio. Sor Esther había notado el mal talante, la ansiedad y la atmósfera saturada de testosterona en el pabellón de heridos del hospital.

Decidió entonces poner manos a la obra y comenzó junto a algunas hermanas a "pajillear" a los robustos y viriles soldados sin hacer distingos de grado. Desde entonces, tanto a soldados como a oficiales, les tocaba su "pajilla" diaria. Los resultados fueron inmediatos.

El clima emocional cambió radicalmente en el pabellón y los temperamentales hombres de armas volvieron a departir cortésmente entre sí, aún cuando en muchos casos, hubiesen militado en bandos opuestos.

Al núcleo fundacional de hermanitas pajilleras, se sumaron voluntarias seculares, atraídas por el deseo de prestar tan abnegado servicio. A estas voluntarias, se les impuso (a fin de resguardar el pudor y las buenas costumbres) el uso estricto de un uniforme: una holgada hopalanda que ocultaba las formas femeninas y un velo de lino que embozaba el rostro.

El éxito rotundo, se tradujo en la proliferación de diversos cuerpos de pajilleras por todo el territorio nacional, agrupadas bajo distintas asociaciones y modalidades. Surgieron de esta suerte, el Cuerpo de Palilleras de La Reina, Las Pajilleras del Socorro de Huelva, Las Esclavas de la Pajilla del Corazón de María y ya entrado el siglo XX, las Pajilleras de la Pasionaria que tanto auxilio habrían de brindarle a las tropas de la República.

NOTA. Personalmente dudo que estos casos estén sustentados en la realidad tal cual se cuentan. Más bien lo tomo y divulgo como producto típico del ingenio español. De echo, el mismo texto está más que extendido en la red, de donde lindamente lo he copiado para solar mío y de mis allegados.

No obstante, esta otra imagen más reciente, no ofrece dudas de la práctica de la masturbación en hospitales. ¿O solo están tománole la temperatura y midiendo el volumen? Y esas chicas no son monjitas ni bragadas republicanas  españolas, ¿verdad?


Por demás, ¿alguien recuerda la escena referente en la película Johnny cogió su fusil? La enfermera realizó un verdadero acto de piedad con lo único vivo que quedaba del soldado, amén de su mente. Vale

9 comentarios:

Antonio Ruz dijo...

Pruden me acabas de dejar con la patas colgando y aun así todavía no estoy convencido de si lo que me estás contando es verdad o me estás colando un farol.
Habrá que investigar este hecho histórico y por supuesto si quedara en la actualidad alguna hermana practicante de su oficio.

Saludos

Pruden perplejo dijo...

No, Antonio, ya no es menester hermanas y paisanas así de abnegadas como aquellas por la sencilla razón de que aquella benávola función fue cosa de las guerras españolas, que ya no las hay. Es que en España las guerras siempre se hacían por huevos y con el cipote, ¿comprendes?, por eso salían tantos soldados mancos que no podían hacerse la gallola cuando le apretaba la necesidad. Y otra cosa de características típicamente española es la religión, tan enraizada como original no hay otra en la tierra, principalmente en el caso de las religiosas, que se casan con Dios y luego, al faltarle su presencia, han de apañarse con tullidos, pero eso sí: sin caer en el pecado, sino por cumplimiento del deber.

En cuanto a ser verídico tan glorioso como remediable asunto patrio, no se podrá constatar porque, al ser actos de voluntad apremiante, no se registraron en los manuscritos de esos hospicios y lugares de culto por no ser cosa propiamente divina. Y en los batalalones de Pasionaria, pues un tanto de lo mismo: todo debería hacerse sotto voce, de puertas adentro, ya tú me entiendes.

Antonio Ruz dijo...

Al igual que hoy en día, que más de uno pide un porracito bien pegao para apañar una paguita, ya me veo yo algún que otro soldado de la época asomando el dedo gordo para que le dieran resfregón e irse derechos para el hospital a que le aliviaran las devotas hermanas.

pruden dijo...

LO que se puede traducir, en ese caso, más vale maña que valor...

Anónimo dijo...

Que increíble informe nos traes, nos dejas perplejos!! Siempre nos sorprendes con cosas muy variopintas. Lo bonito de tu blog es el estado de realidad y ficción que en el que nos envuelves y a veces hiperreales. Gracias Pruden.

pruden agradeciente dijo...

Como la vida misma. Eso pretende aquí un servidor.

Gracias a ti, Anónimo, porque si hay algo importante, será darle el lucimiento más amable a lo que somos, ¿no te parece?

Anónimo dijo...

Sí, claro, bastante cruel es la vida como para no adornarla un poco. Pero eso lo sabes hacer tú, no todo el mundo tiene esa facilidad. Y a veces es que la realidad supera la ficción, por eso tus relatos gustan tanto, no sabes muy bien en que estado te encuentras. Hasta pronto

Anónimo dijo...

Por favor, les pido a todos que se fijen en todas las páginas de internet en las que encuentren información sobre este cuerpo de pajilleras.

El texto es uno mismo que se repite hasta el cansancio y además, es falso.

Hay otro número de páginas que dejan a al luz esta mentira...


Amigo, dedícate a publicar información verdadera e inédita, por favor...

Javier dijo...

Sorprendente y esperanzador....si algún me toca espero que me toquen.jejejeje